Noches apasionadas

Hay en total tres noches que han sido un tanto extrañas, supongo que para ambos, de las cuales querría hablar aquí, se que no os gustan mucho estos temas, pero es por que en en el presente están apareciendo pequeños secretos y sueños relacionados con pequeños incidentes (en realidad es solo uno)que ocurrieron durante una de estas noches. La primera "noche apasionada" ocurrió poco después de "la primera vez", ese día nos quedábamos en mi casa y no sabíamos que hacer así que pusimos la televisión. Inicialmente estábamos en el salón, pero no recuerdo exactamente cuando terminamos en mi habitación. Al principio le prestábamos atención a la película, pero a medida que avanzaba la historia esta iba careciendo de sentido, así que los besos y las caricias empezaron a aparecer hasta que llegó un momento en que decidimos apagar el televisor y ya saben... esa noche fue una de las más extrañas de toda mi vida, nos dimos pequeñas sorpresas uno a el otro, hicimos cosas que nunca habíamos hecho y experimentamos sensaciones nuevas y placenteras.
Durante los siguientes meses me recordó aquella noche con frecuencia y me decía la típica frase "no puedo quitarme de la cabeza lo del otro día", fueron momentos extraños que recordé con vergüenza. Otro de esos días fue durante la fiesta de fin de año. Él había estado muy extraño todo el día, inicialmente porque se apuntó a la fiesta gente que no conocía ( la fiesta era en su cochera)así que intente animarlo un poco, pero mi intento fue fallido.
No volvió a ser él mismo hasta que aquella gente no se marchó, pero era el mismo con todos menos conmigo, parecía que me estaba esquivando (este es uno de los motivos de "mis pequeñas dudas")y no entendía porque, le hacía caso 5 minutos y encontraba cualquier escusa para irse, no lo supe hasta unas horas más tarde.
Todos se habían ido, la fiesta había sido un éxito y yo había conseguido deshacerme de mis ralladas y había disfrutado de la fiesta.
Un dato que me extrañó fue que después de "la primera vez" no habíamos subido a el cuarto "forever alone" sino que dormíamos en su habitación, eso me sorprendió, pero no entendía el "porque ahora". Cunado ya estábamos en la cama intenté dormir (mi pensamiento fue " con lo raro que está esta noche nada"),ni siquiera nos abrazamos para dormir, estaba realmente extraño.
No podía dormir, tenía frió, ya hacia un rato que estábamos en la cama así que pensé que estaba dormido así que me moví en busca de manta.
De repente oí su voz "¿Que te pasa?" yo le contesté que tenía frío y le pregunte "La pregunta sería que te pasa a ti ¿Porque no estas dormido?" Me explicó que había estado evitándome porque si no lo hacía me "violaría", me sorprendí bastante, yo no había hecho nada para que estuviese así, pero el me dijo que lo había estado pinchando todo el rato (se ve que lo hago sin querer). Le pedí si podíamos abrazarnos para poder entrar en calor y ese fue el inicio de la noche.
Por desgracia esa noche no terminó del todo bien, hubo un accidente con el preservativo y llegué a pensar que sería madre, en realidad me hubiese gustado, si no llega a ser por los estudios lo hubiera tenido, llegué a amar a ese niño que ni tan solo había nacido y desde ese día no paro de pesar en él, el hijo que nunca tuve.
Esa noche nos quedamos mirando el amanecer, juntos, abrazados, pensando en todo lo ocurrido. Otro día de esos tan "apasionados" fue hace poco, eran fiestas del pueblo, habíamos bebido y según él estaba más cariñosa de lo habitual, yo sencillamente me limite a decirme "estoy como siempre quiero estar, a tu lado".
Después de muchos besos y abrazos el me comento que estaba cansado y quería ir a algún sitio a sentarse, eso me olió a chamusquina así que decidí chinchar-lo un poco y le sugerí que nos sentáramos en la acera, seguidamente me dijo que tenía frío y yo continué con el juego así que le dije que no sabía de ningún sitio caliente por la zona.
Un ratito más tarde me pidió si podíamos ir al salón de mi casa yo le contesté que si, así que fuimos a mi casa. Allí me senté delante de la chimenea y el a mi lado, entonces me dijo, "así sentado me duelen las piernas, ¿no podría tumbarme en algún sitio?" yo le dije que si y le saqué una silla para los pies.
El se quedó con cara de "wtf", pero no dijo nada, por último me dijo que se sentía incomodo acostado de esa manera, que si podíamos ir a mi habitación, finalmente yo accedí a ello y como imaginaba ocurrió lo que tenía que ocurrir.
Esa noche fue especialmente placentera, no tengo ni idea de cuanto tiempo estuvimos así, pero fue una noche inolvidable, creo, para ambos. Estuvimos mucho tiempo y paramos porque nos hicieron "coitos interruptus", era hora de que el volviera a casa y le quedaba un largo camino que recorrer.